Esta página nace para complacer los deseos de mis incontables y susceptibles seguidores, quienes no podrían vivir sin sus indispensables relatos, apoyados en décadas de estudio y maestría en diversas disciplinas (bah, todas en realidad). Ellos saben que nadie como yo puede contarles, y explicarles (en un léxico a la altura de su comprensión, para lo cual tengo que rebajarme bastante) (y hasta cometo adrede algunos errores de ortografía, para que no se vean tan inferiores), cómo son las cosas en las lejanas comarcas que tengo en suerte visitar. De mas está aclarar que confían ciegamente en todo lo que les transmito, y obviamente nunca se les ocurre intentar verificarlo por la whiskypedia, opiniones de terceros, y mucho menos apelando a su decadente experiencia personal...

marzo 28, 2015

Día 10 - Aclimatación


Y bua, pasó lo que tenía que pasar, si ya venía al límite con el tema del cansancio y el tiempo para escribir en las otras ciudades, la conjugación del shock que produce exponerse por primera vez a la monstruocidad de esta megaurbe con el desgaste de los días anteriores y apenas un par de horas de sueño la noche de ayer me terminó de liquidar; así que, siendo de nuevo casi las 2 am, los voy a dejar descansar un poco con el reporte de hoy, ya que no va a ser como siempre, śolo las fotos y un par de comentarios.



La guillotina de rosquillas. 

Messi en el Washington Post.


La gigantesca estación de micros y trenes de Washington, Union Station.



Micrito de Grey Hound, con enchufes.


Contaminación explícita


Walter on the move.




La completísima habitación del Salisbury, el cual, dicho sea de paso, tiene una ubicación de puta madre! (gracias Red).



Carucha ante edificios locos.


Exterior del local de Apple.




Interior del bestial local de Apple, con la mayor densidad de empleados que he visto.



Peluches de la juguetería FAO.


Zoltar, de la película "Big" (quisiera ser grande, para nosotros).





Cateras copadas de Star Wars.




El piano de la misma peli, esta vez, en lugar de Tom Hanks, tocado por un niño semiprodigio que se mandó casi sin errores la novena sinfonía.


Donald.




Enorme y loquísimo local de Uniqlo.


Fachada de la catedral de San Patricio.


Atlas del Rockefeller Center.




Catedral de San Patricio, en reparaciones, como todo acá...


Lo que tienen en vez de cancioneros...


Rockefeller.








Times Square.



Ruedota de Toys r us.







Gente como para hacer dulce, y todo abierto, a las 23 hs.











Una locura el local de m&m's


Lo último que se pierde.


Yanquicena.


Decían que era la mejor cheesecake de la ciudad, y, a pesar de que por la pinta no le teníamos fé, la verdad etuvo riquísima la hp.



Walter frente al Carnegie Hall


Russian Tea Room, supuestamente frequentado por Woody.



Birras.


Manzanitas.



Especias & stuff.


Nuestra miniheladerita comenzando a tomar color.

4 comentarios:

  1. Escuchame una cosa: 34 años tomando agua de la canilla en una lata de duraznos y ahora metés esa botella en la heladera: así no campión, jaja.
    Saludos!
    7-0

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Jajajaja, boludo, y qué me dicís del diacetil rest y la maduración, jajaja... tenía que entrar en la foto...

      Eliminar
  2. Que ciudad Nueva York!!!! Todo a lo grande. Extrañamos el reporte.... las fotos como siempre muy buenas y reflejan el consumo y poderío del país. Dos características que la hacen única. Besos para vos y Walter. Ahora sí se le ve la cara. Paso el gran frío. Graciela.

    ResponderEliminar